- Arquitectura
- Aire libre
- Geek
Se sitúa en el centro del paseo marítimo fue encargado al arquitecto Frank Gehry, para redefinir la fachada marítima de Barcelona.
Metro: L4 (Amarilla) Ciutadella – Vila Olímpica
Frank Gehry, uno de los arquitectos más galardonados de los últimos tiempos, con premios como el Pritzker en 1989 o el Premio Príncipe de Asturias de las Artes en 2014 dejó su sello en Barcelona con Pez, una escultura de descomunal tamaño que encontramos junto al Casino de Barcelona, con la que el ayuntamiento quiso redefinir su fachada marítima. El puerto olímpico, las dos torres…y una figura enorme de 56 metros de largo y 35 de alto que parece que en cualquier momento vaya a zambullirse sobre las aguas del Mediterráneo frente al que está situada.
Este encargo llegó en 1992, cuando la transformación de Barcelona a raíz de los Juegos Olímpicos que se celebraron en la ciudad supuso la recuperación del frente marítimo para un uso ciudadano. Se crearon entonces el casino, las torres Mapfre y el puerto Olímpico, una nueva zona de ocio y restauración para todos los barceloneses. En ese contexto, el arquitecto canadiense, creador de edificios tan singulares como el museo Guggenheim de Bilbao, quiso realizar una escultura que reflejase el carácter mediterráneo y marinero de Barcelona.
Realizada sobre una estructura metálica, es su capa exterior, construida en acero inoxidable de color dorado, la que otorga belleza y singularidad a la creación. En función de la intensidad de la luz y del reflejo de los rayos solares sobre ella, esta capa exterior parece convertirse en una piel escamada que llena de vida al inanimado objeto, visible ya desde la playa de la Barceloneta. Es por este juego de luces que la salida del sol desde el mar y la puesta de sol al atardecer se convierten en los momentos preferidos por los visitantes para inmortalizar esta estampa tan colorida.